jueves, 10 de abril de 2014

El rock del ancazo


Metal progresivo experimental con toques de psicodelia, funk, free jazz y letras en idiomas inventados, desde la tierra del Monumento al Sánguche de Milanesa, con un Mars Volta de invitado. ¿Qué carajos? El trío tucumano Los Random se está convirtiendo en uno de los más prestigiosos grupos emergentes argentinos gracias a Pidanoma, su reciente segundo disco, una obra exigente y maravillosa que traslada por varias capas de sensaciones, climas y sonidos. Un álbum que cumple con el mandato del Señor Damián, que aparece sampleado entre la banda, y Marco Antonio Solís: todo se trabaja mentalmente.

En 2009, el demencial EP Prrimo, The les sirvió de presentación. En Todo.s los colores del (2011), acentuaron su veta metalera abrumadora y comenzaron a destacarse. En este nuevo trabajo, la madurez de estos pibes que promedian los 24 años sorprende. Grabado en vivo en su estudio de Tafí Viejo, con la producción de Ramiro Rodríguez, Pidanoma fue publicado de manera virtual a fines de enero a través del sello Las Tías Records. Apareció el mismo día del nacimiento de Felipe, segundo hijo del baterista Marcos Crosa: la banda esperó a que el niño naciera para darlo a conocer.

Pidanoma no tiene el gancho inmediato de canciones pasadas como "Elchi, John" o "Cachafaz". Tampoco abunda esa brutalidad inicial que hacía volar cabezas con furia deslumbrante. El grupo se abrió musicalmente y abandonó las letras en inglés. Se mantienen los términos tucumanos, presentes en todos sus discos, que le aportan identidad. Las palabras funcionan como un instrumento más. Acompañan a la música, como alguna vez supo hacer Seru Giran. La introspección es la protagonista. El trío baja a las oscuras profundidades del sonido para salir disparado más lejos que nunca. “Lo grabamos tres veces, las dos anteriores tenían todo dado vuelta, no había madurado. Había riffs que estaban en otro tema o partes sin tanto protagonismo. Era más corto, un poco más desordenado. El disco mismo nos fue exigiendo muchas cosas, como desterrar el inglés o también no meter tantas voces”, recuerda Raúl García Posse, cantante y guitarrista.

En dos meses, Pidanoma cosechó excelentes críticas, no sólo en Argentina. Aparecieron reseñas escritas en Rusia, Italia, Estados Unidos, Venezuela, Egipto, Francia. El popular sitio New Album Releases subió el álbum a su lista de lanzamientos destacados. Y en el último Festipez, realizado en febrero en la Ciudad Cultural Konex, los músicos participantes hablaban de la banda sin ahorrar elogios.

“No es un disco de escucha ligera. El mambo es súper profundo. Arranca con todo y luego comienza el trance”, describe el bajista Pablo Lamela Bianchi, acertando el diagnóstico. La primera canción, "Corto normal", es casi una continuación de Todo.s los colores del. "Ojota y media" es un breve collage que sirve de introducción al verdadero inicio de Pidanoma: "Mee Chango", que cuenta con la participación del ex Mars Volta Adrián Terrazas-González en saxofón. Allí surge la sensación de que Pidanoma es uno de los puntos más altos de 2014. Del under y de todo el rock argento.

“Me contactaron ellos por Facebook. Me mandaron algo de la música que querían que grabara y se me hizo interesante. Hice las grabaciones en un par de días en mi estudio y listo. Así fue como funcionó”, dice Terrazas-González desde Los Angeles, donde vive hace diez años. El mexicano cuenta que disfrutó colaborar con los tucumanos: “Mucha de la música que he tocado desde la infancia es escrita, con muchos parámetros, todo muy orquestado. Esto me sugirió libertad. Creo que es un disco que se debe escuchar entero. No es de esos trabajos que puedes ir de pieza en pieza buscando cuál es la que te gusta. Exige escucharlo detenidamente”.

La conexión lograda entre Los Random y Terrazas-González provoca uno de los grandes momentos del disco. Raúl coincide y opina que las secciones mántricas llegan a ser muy desquiciadas. “Cuando estamos todos delirando, nosotros tres, la hijita de Marcos (N. de R.: Malena, que tomó el micrófono y brindó un aporte inesperado) y Adrián, hay un momento de tanta tensión que llega a ser demasiado inquietante, pero dan ganas de quedarse, es rarísimo. Son esas cosas horribles que te llegan a encantar, como GG Allin”, explica.

Pidanoma (disponible en randomprog.bandcamp.com) cierra con "Gurí Gurí Tres Piñas", una pieza de 21 minutos que Raúl define como lo mejor que hizo la banda hasta el momento, y un ejemplo del camino a seguir. “Siempre que hablamos entre nosotros concluimos que la música nos va exigiendo todo lo que vamos haciendo”, agrega. Ojalá le sigan haciendo caso.

Publicado hoy en el suplemento No, de Página 12.

2 comentarios:

Savoy reminiscencias dijo...

te gusta revolver mierda salteño pija pobre

Cadorna Not Dead dijo...

"Savoy reminiscencias" jajaja. FR vuelve a ser lo que era <3